Un grupo de paleontólogos ha descubierto en Atapuerca un craneo (llamado craneo "14")perteneciente a un niño/a, de 10 años aproximadamente, con una extraña malformación del craneo, la craneosinostosis ( La fusión prematura de las suturas del craneo). Esta enfermedad se manifiesta en 6 de cada 200.000 nacimientos.
En los humanos actuales y sus antepasados, los huesos no se sueldan completamente hasta que el cerebro alcanza su tamaño definitivo. Esta anomalía produce una fusión prematura de las fisuras craneales sometiendo el cerebro a una presión anormal, haciéndole crecer. Este hecho puede producir retraso psiquico en el desarrollo del individuo.
Una de las conclusiones a las que han llegado es que nuestros antepasados no discriminaban a los bebes nacidos con malformaciones porque han visto que este individuo fue ayudado para que pudiese sobrevivir hasta los 10 años.
En los humanos actuales y sus antepasados, los huesos no se sueldan completamente hasta que el cerebro alcanza su tamaño definitivo. Esta anomalía produce una fusión prematura de las fisuras craneales sometiendo el cerebro a una presión anormal, haciéndole crecer. Este hecho puede producir retraso psiquico en el desarrollo del individuo.
Una de las conclusiones a las que han llegado es que nuestros antepasados no discriminaban a los bebes nacidos con malformaciones porque han visto que este individuo fue ayudado para que pudiese sobrevivir hasta los 10 años.
Este niño/a vivio hace 530.000 años y no se le trato como un extraño (no fue excluido como en otras culturas mas tardías).
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